El ciclista camina en el aire
El ciclismo es una religión. El creyente pedalea con fervor y cuando puede le alza un altar a su bicicleta. El proceso que sucede en su cerebro es una sinapsis en la que se producen endorfinas: adrenalina, serotonina y dopamina, los neurotransmisores responsables de liberarnos del dolor, regular la alegría, la emoción, la tranquilidad y el sueño. Una reacción semejante sucede en el cerebro del creyente religioso cuando va a misa de ocho de la mañana. Cada quien sus métodos. Lo interesante es que el ciclismo también te puede conducir a estados de conciencia alterada y éxtasis místico. La bicicleta es un regalo divino. Si Jesucristo caminó en el agua, el ciclista camina en el aire, como los ángeles.
3 comments:
jajajaja, está deliciosamente sacrilega esa imagen de chucho biker.
No pude escuchar la rola de Ram Jam, me mudé a linux y el audio no termina de quedar configurado... quedé antojado.
Y con respecto a eso de las motas a la carta, como observas, parece una consecuencia inevitable de como modificamos nuestros recursos y como estos modifican nuestros usos.
A mi eso de la lucha contra el narco, simplemente no me cuadra del todo, hasta pareciera que México se está poniendo en una posición de victima ante el GRAN MOUNSTRO del narco para que los SUPERHEROES gringos vengan a salvarnos. Que se yo, quizás me domina una paranoía ligera producto de años de consumo de mota.
Saludos!
Aunque difiero en las reacciones químicas que ocurren en mi cerebro cuando ando en bici y cuando he tenido que ir a misa a las 8 de la madrugada... interesante punto de vista.
Excelente blog, maece. Te leía desde la Mosca y al fin encontré tu blog. Gran analogía de los ciclistas e interesantes datos sobre el cerebro, nolo sabía, es más ni siquiera lo sospechaba aunque luego de andar en bici siempre me pongo feliz, ahora que recuerdo.
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